27 de agosto de 2018.- Los de Torrelavega se han enfrentado al Real Unión en el Stadium Gal tras cinco campañas alejados de la añorada Segunda B

El Diario Montañés.- La Gimnástica afrontaba en el Stadium Gal de Irún su vuelta a la Segunda División B con la dificultad de enfrentarse a un histórico como el Real Unión. Los de Pablo Lago hicieron un buen trabajo y se llevaron un punto gracias a un gol inicial de Esnaola en propia puerta y a una buena consistencia defensiva en el resto del encuentro. La Gimnástica llevaba seis años sin enfrentarse al Real Unión y no partía como favorito ante el cuadro vasco debido a su experiencia en los últimos años en la categoría. El cuadro cántabro ha podido mantener el subidón del ascenso logrado la temporada pasada, donde realizaron una gran segunda mitad de campaña con la llegada de Pablo Lago al banquillo del equipo. Consiguió subir a Segunda B ante el Mallorca B tras una doble eliminatoria donde fueron mejores ante un rival muy complicado como el balear.

La Gimnástica se plantó en Irún con un cambio de sistema. En lugar del habitual 4-4-2 de Pablo Lago, utilizó un 4-5-1 con Luis Alberto en el eje de la zaga flanqueado por Camus y Bardanca seguido por Fer y Docal en los carriles. Tuvo un centro formado por Cusi y Palazuelos, Fermín y Vitienes en las bandas, con Nacho en punta. El Real Unión, que venía de hacer una buena pretemporada, con el estreno en el banquillo de su excapitán Juan Domínguez, formó con un 4-3-3 con idea de dominar el balón y marcar el ritmo del partido.

Las primeras ocasiones fueron para el Real Unión, que se vio dominador. La primera jugada fue en el minuto 6, un balón que Ruiz metió en banda derecha y el centro estuvo a punto de anotarlo Eizmendi. La siguiente ocasión fue en el minuto 8 para el cuadro vasco, una jugada de Beitia que se fue de varios rivales, pero su remate flojo lo pudo detener Álex sin problema.

Para la Gimnástica, la primera ocasión llegó en el minuto 9. Consiguió forzar un córner que botó Camus, el balón quedó en el área pequeña, y Esnaola marcó en propia puerta el 0-1 tras buscar un despeje defensivo. El Real Unión trató de reponerse del gol visitante por medio de ataques en la banda derecha con el extremo Capelete como hombre más avanzado.

Fue el propio Capelete en el minuto 12 quien, con un centro chut desde la derecha, envió el balón al larguero defendido por Alex. En el minuto 16 se produjo una nueva aproximación del Torrelavega, una internada por la izquierda que centró Fermín, desvió la defensa hacia fuera y, tras una jugada de Cusi, consiguió detener el portero del Real Unión. A partir de ahí, el dominio fue para el conjunto local.

En el minuto 20, un centro de Capelete lo remató Orbegozo a bocajarro, pero el guardameta de la Gimnástica estuvo atento para evitar el tanto. Tan solo tres minutos después llegó otro aviso. Un centro de Eizmendi desde la izquierda lo remató Etxaburu, pero una vez más lo detuvo Álex sin mucha dificultad. Después, otra jugada de Capelete por banda derecha acabó centrado y rematado cruzado por Orbegozo se marchó lejos de los tres palos.

Seguía el acostó del Real Unión y ahora, una jugada de Estrada y Orbegozo fue centrado raso por el primero y Beitia termina rematando por encima de la portería cuando tenía la posibilidad de cara. A falta de 15 minutos, remate de Ceberio para el Real Unión, pero el guardameta de la Gimnástica volvió a mostrar sus reflejos.

En el minuto 35, centro de Beitia desde la banda izquierda para que Orbegozo pudiera rematar, pero volvió a mandar el esférico desviado de la portería de Álex. La Gimnástica pudo aumentar la ventaja en el marcador tras un córner botado por Docal en el minuto 38, el balón se paseó por el área pequeña y no encontró rematador. El ariete del Real Unión despejó fuera de peligro.

Los locales volvieron a acercarse al área rival tras una pared de Beitia y Etxaburu, disparo del primero y Álex, esta vez, tuvo que esforzarse al máximo para evitar el empate. El Real Unión buscaba el empate antes del descanso y lo consiguió en el minuto 46 en un centro de Ceberio mal despejado entre el portero y Luis Alberto, algo que aprovechó Orbegozo para poder rematar al fondo de las mallas.

No hubo tiempo para más en una primera mitad en la que el Real Unión dominó y consiguió reponerse al primer tanto de la Gimnástica.

En la reanudación del partido, el guion varió ya que el ataque del Real Unión no fue tan incisivo. La Gimnástica conseguía contener el juego local sin tener situado a su equipo tan atrás como en la primera mitad. No obstante, fue el equipo local quien más ocasiones tenía, primero con un disparo de Capelete tras sortear a varios rivales y que detuvo Álex.

En el minuto 62, un centro desde la banda izquierda de Eizmendi se paseó por el área pequeña sin que ningún rematador pudiera mandar el cuero a la red. Pablo Lago decidió hacer un doble cambio en el minuto 64 para oxigenar a su equipo y tratar de encontrar la clave de volver a ponerse por delante. Rozas, que acababa de entrar, se sincronizó bien con Fermín y consiguió profundizar en ataque para la Gimnástica, pero sin lograr jugadas destacadas.

El técnico del Real Unión decidió realizar un cambio de cromos entre los dos hermanos Eizmendi, un cambio que dio algo de brío a la banda izquierda unionista. El equipo vasco seguiría dominando el balón, pero no podía con la bien tejida defensa cántabra. En el minuto 71 se produjo un nuevo cambio en el Real Unión, un cambio de Sola por Etxaburu, pero apenas tuvo incidencia en el juego de los locales, ya que Sola apenas participó en el resto del partido.

A falta de algo más de 10 minutos, el Real Unión seguía presionando por la banda derecha, pero la Gimnástica respondía de igual manera gracias a Fermín y Rozas. Pablo Lago dio entrada a Víctor en el lugar de Vitienes y éste le dio algo de aire a una de las bandas del cuadro cántabro. Fue entonces cuando llegó una doble ocasión para la Gimnástica, una falta cerrada sacada por Camus y despejada a córner, sacado cerrado buscando el gol olímpico, pero el guardameta del Real Unión pudo detenerlo. Los últimos minutos del partido vieron cómo decaía el ritmo del juego, principalmente por ser el primer partido de la temporada, y el reparto de puntos parecía un hecho. Los locales pudieron haberse adelantado en el 87, pero el remate de Ceberio lo detuvo Álex. El cuadro cántabro también pudo hacerlo en el descuento, pero la defensa estuvo providencial para sacar el remate de Camus.

Al final reparto de puntos que dejó relativamente satisfechos a los dos equipos. Al conjunto local, el Real Unión, por rehacerse del gol en contra inicial, en una temporada en la que buscará pasar menos apuros que en la campaña anterior para mantenerse con su cambio en el banquillo. Para la Gimnástica, el punto fue bueno ya que los de Pablo Lago empataron de uno de los equipos más veteranos del grupo de Segunda B, haciéndolo, además, de manera especial tras cambiar su forma de juego habitual del 4-4-2 a una defensa de cinco.