El Diario Montañés.- El Club de Rugby Santander, rebautizado como Bathco toda vez que la empresa de lavabos ha vuelto a apostar por patrocinar a un equipo cántabro tras su paso por el Independiente, inició este domingo su andadura en la División de Honor B, categoría a la que ascendió la pasada campaña, con una paliza frente al filial del conjunto vallisoletano del Salvador. El resultado final, 48 puntos a 12, fue fiel reflejo de la superioridad local. Un buen precedente para un año en el que el deseo gravita en torno a luchar por poder subir a la máxima categoría del rugby nacional.
Los locales saltaban al césped del Complejo Ruth Beitia (La Albericia) con la firme intención de empezar a sentar las bases para su difícil y ambicioso objetivo. Y la verdad es que no dieron lugar a la sorpresa ante un conjunto pucelano que se vio desarbolado por las prestaciones del Bathco.
En el minuto diez de juego se adelantaron los santanderinos con un golpe de castigo de Baltazar Zaibo. Tan solo un aperitivo del vendaval que llegaría en los minutos siguientes. Apenas ocho minutos después llegó el primer ensayo del Bathco en la División de Honor B. Bartholomeu Hills fue el encargado de tal honor para poner un 10-0 que rápidamente fue ampliado con un ensayo de castigo en el minuto 26, con transformación de Zaibo; y otro oval posado en zona de anotación por Freddy Ferreras en el 31. El descanso se saldó con un 22-0 en el marcador que dejaba bien a las claras la superioridad cántabra.
Plácida segunda mitad
El paso por los vestuarios no varió el guión del encuentro. Más bien al contrario. El Bathco siguió ampliando ventajas con otros dos ensayos en el 42 y 48 de juego firmados por Zaibo y Hills, respectivamente. El apertura de Bathco no perdonó con las patadas y puso el 36 a 0 para los de Santander.
Los pucelanos, ante tal panorama, apenas pudieron maquillar las estadísticas. En el minuto 65 Sarmentero estrenó los ensayos del Salvador B, pero rápidamente Van de Ven dio la réplica para los locales. Con el partido ya agonizando llegaron otros dos ensayos, uno por cada escuadra.
El pitido final dejó un contundente 48 a 12 que apunta bien claro que el Bathco viene a morder a la División de Honor B del rugby nacional.