Día invernal en Santander y como era de esperar se pudo ver en el Complejo Municipal de Deportes «Ruth Beitia», un partido de los de barro, contacto y muchas melés, y en los que las delanteras tendrían que trabajar de lo lindo si querían llevarse el gato al agua.
Y no defraudó el partido con lo esperado, partido de mucho contacto, con poco juego a la mano y en el que los dos equipos trataban de llevar el peligro al campo contrario con largas patadas a la zona de peligro rival, el apertura internacional por Malta Crishtopher Dudman y del zaguero Baltazar Taibo, bien resueltas por un muy seguro zaguero vizcaíno Gorka Zabala, bien apoyado en el ala derecho por Facundo Ruiz, que resolvieron con mucha solvencia estas acciones y replicando del mismo modo al equipo cántabro, evitando con esto cometer errores en campo propio que pudieran acarrear puntos en contra en el marcador.
Pocos cambios presentó Simon Hafoka, el nuevo entrenador cántabro en su primer partido tras la destitución de Mario Copetti, en la alineación cántabra con respecto a los últimos encuentros, si bien se pudo observar a un equipo muy serio defensivamente, algo de lo que adolecía las «focas» en los últimos partidos, notándose ya la mano en estas pocas semanas de entrenamientos en esta faceta.
Y así transcurrieron los 15 primeros minutos del encuentro en un toma y daca por ambos contendientes el que no terminaba de definirse el control del mismo, si bien los santanderinos parecían superiores en las fases estáticas, ganado sus melés y superando no sin dificultad al Uribealdea en las suyas.
Una indisciplina en el minuto 16 por parte del equipo vasco, provocó que Baltazar Taibo, adelantará a Bathco con una transformación por un golpe castigo, que abrió el marcador (3-0).
Parecía en ese momento que el control del equipo pasaba a manos del equipo local, que en el minuto 21, y tras varias fases de juego en la zona de peligro vasca, lograba un ensayo por medio de Fernando Iraizoz, que no pudo refrendar Baltazar Taibo con los dos puntos adicionales de la consiguiente transformación.
Seguía Bathco trabajando con sus delanteros, no sin pasar muchos apuros defensivamente, hasta que en el minuto 27, Crishtopher Dudman se sacaba de la chistera un «DROP» centrado desde la zona de 22 que con la dificultad añadida del bote del balón debido al estado del terreno de juego, logró pasarlo por los tres palos, sumando otros 3 puntos al global del marcador,(11-0).
No tardo en llegar la reacción de Uribealdea que de la mano del veterano jugador e internacional por España Aitor Etxebarria, que entró sustituyendo al lesionado Artigas, puso mucho orden en la 3/4 vasca que por medio de Gorka Zabala creaba peligro en cada acción en la que participaba.
Ya en los últimos estertores del primer tiempo, lograban los vizcaínos sus primeros puntos en su casillero, en el minuto 32, Zabala, con una lejana patada desde casi medio campo, sumo tres puntos que dejaba un parcial del 11-3, refrendado en el 39 con un ensayo en el minuto 39 de el jugador más destacado del Uribealdea, el neozelandés Jordyn Wikitera, que aprovecho un error de la zaga verdinegra, llegando al descanso con un 11-8 y las espadas en todo lo alto para los segundos 40 minutos.
Ya en el segundo tiempo, en el minuto 42 otra indisciplina defensiva de Uribealdea, fue aprovechada por Baltazar Taibo para sumar otros tres puntos al marcador fruto de un golpe de castigo en la zona de 22 del equipo vasco. (14-8)
y con el terreno de juego cada vez más pesado con el paso de los minutos, no se decantaba el juego para ninguno de los dos equipos, viéndose que el equipo que menos errores e indisciplinas cometiera, se llevaría el partido.
Y así iban pasando los minutos, con muchas melés y poco juego a la mano cuando en el minuto 57 se vio una jugada que rompió la monotonía del encuentro y que todos los presentes aplaudieron, ya que pocas veces se ve en un partido de rugby, a un primera línea, en este caso Markel Lopategi, después de una jugada en la zona de 22 cántabra en la que jugaban en ventaja por infracción cántabra, decidió jugarse un «Drop», acertando a meterla entre los tres palos, para algarabía de los presentes. (14-11)
De ahí, al final del encuentro, el baile de cambios habitual refrescando los dos equipos, y poco juego en el campo, con mucha batalla en la zona del «Breakdown» en cada punto de encuentro.
En el minuto 71 fue castigado el Uribealdea con una tarjeta amarilla a su jugador Iñigo Romo por reiteración en los golpes de castigo, dejando a su equipo con 14 jugadores hasta el final del encuentro.
En el minuto 74 un nuevo golpe castigo transformado por Baltazar Taibo, muy acertado durante todo el encuentro, dejo el marcador en el 17-11 que reino en el marcador final.
Muy buen resultado para Bathco Rugby Club, en esta jornada que aprovecha para recortar 3 puntos al Babyauto Zarautz, que le precede en la clasificación y que ocupa la segunda plaza de la liga en este grupo A, aunque este último tiene un partido más en su haber.