Foto: El tanto del capitán Aitor San Emeterio en el 88′ anuló el gol inicial de Cusidor anotado diez minutos antes.
SD TEXTIL ESCUDO: Alberto, José Antonio, Guijarro, Marcos, Aitor, Bruno, Raúl Rivero (Héctor Alonso, 58′), David (Pitu, 77′), Guillermo, Cano y Valentín (Iglesias, 69′).
RS GIMNÁSTICA: Rubén Lavín, Fer, Fermín, Camus, Chamorro, Cusi, Vitienes, Luis Alberto, Ito, Prada (Palazuelos, 71′) y Emilio Herrera (Casta, 84′).
Goles:0-1.
Cusi (min 79)
1-1. Aitor (min 88)
La Gimnástica se situó colíder tras cosechar un empate en la complicada salida al Juan María Parés Serra de Cabezón de la Sal. Se habría situado líder en solitario si el conjunto local no hubiera empatado ya en el tramo final, cuando parecía que los torrelaveguenses harían valer el tanto de Cusi en el minuto 79′. Un partido intenso, con un fútbol como el de antaño, sobre todo en el primer acto, cuando las condiciones del terreno de juego impidieron cualquier práctica que conllevase rasear el cuero por el césped.
Durante la primera parte ninguno de los dos equipos llevó la voz cantante, pues se antojaba complicado dominar teniendo en cuenta la cantidad de lluvia que aterrizó sobre el Juan Mª Parés. Es por ello que, ambos conjuntos, decidieron reducir riesgos en defensa alejando todo balón que merodease su zona de peligro. Parecía que solo la estrategia podría desequilibrar un partido con tal guión. Por eso las ocasiones fueron pocas, aunque no por ello menos claras. La Gimnástica fue la que primero avisó con Álvaro Prada como principal protagonista, intentándolo sin éxito en varias ocasiones con disparos lejanos. Aunque la más clara, como era de esperar, fue a través del balón parado. Cusi no se esperó la salida errónea de Alberto al intentar atrapar un saque de esquina y el balón le rebotó en el muslo cuando el propio centrocampista gimnástico estaba prácticamente pisando la línea de gol. Poco después, una arrancada de Ito le dejaba solo ante el meta rival hasta que Aitor contactaba con él y lo derribaba, sin que el colegiado detectase nada punible en esa acción.
La respuesta del Textil Escudo llegó pasado el ecuador del primer acto con un nombre propio: Rubén Lavín. El meta ayer titular del conjunto gimnástico realizó dos grandes intervenciones para salvar a los suyos. Detuvo, primero, el mano a mano con Raúl y, en el rechace posterior, se lució con una estirada a disparo de Valentín.
La lluvia cesó en la segunda mitad y el estado del terreno de juego mejoró considerablemente, hecho que permitió a ambos equipos echar la pelota al piso y brindar un mejor fútbol a los aficionados allí presentes. Sin embargo, las ocasiones siguieron sin llegar con demasiada asiduidad y el juego en las áreas se reducía a jugadas de estrategia. En una de ellas, entre Luis Alberto e Ito no acertaron a rematar el extraordinario servicio de Camus.
Alfonso del Barrio introdujo en el terreno de juego a Palazuelos con la intención de encontrar remate a los centros que sirvieron Vitienes y Herrera, y el propio veterano centrocampista cabeceó alto el primer balón que tocaba. Por su parte, el Textil creaba peligro en alguna acción a balón parado en la que se produjo un barullo en el interior del área que nadie supo rematar.
Llegado el 79′, Palazuelos recibió de Fer en la frontal, abrió hacia el perfil izquierdo donde estaba Cusi, y este con un inapelable disparo inauguraba el marcador. Zapatazo fuerte, seco y cruzado a la base del poste que desató la locura de la afición visitante.
Parecía que así se quedaría el resultado pero el Textil, valiente y con nada que perder, se lanzó en busca de la igualada. Lo consiguió por medio de Héctor, en el 82′, aunque el árbitro asistente señaló fuera de juego e invalidó la diana. Sí subiría al marcador el gol de Aitor San Emeterio, capitán cabezonense, que remachó a gol un balón suelto en el área pequeña tras una serie de remates de unos y otros. El capitán local, desatado por el gol del empate, sería expulsado por su inapropiada celebración dirigiéndose hacia la afición torrelaveguense.
Con el descuento por delante, los locales trataron de mantener el resultado y frenaron el ritmo visitante. Pese a ello, la Gimnástica tuvo dos claras para llevarse el partido. Primero, con un remate de Palazuelos que detuvo Alberto y que Vitienes no pudo empujar casi en línea de gol y después, con una volea de Ito en el segundo palo que salió rozando el poste.
La Gimnástica iguala al Laredo en la cabeza de la tabla después de que los pejinos cayesen en Tanos (4-2). El próximo choque de la Gimnástica será en Santa Ana, donde recibirá a un Cayón que viene de endosarle una goleada al Barreda (6-0).