Los locales completaron uno de los mejores partidos en El Malecón en el debut de Dani Mori.

R.S. Gimnástica: Álex Ruiz, Fer, Fermín, Ramiro, Luis Alberto, Cusi, Primo (Víctor, 57’), Palazuelos, Nacho Rodríguez, Alberto (Vitienes, 74’) y Leandro (Salas, 86’).

SD Leioa: Iturrioz, Aguiar, Crespo (Juan Mera, 64’), Córdoba, Mukel Fernández, Jon Iru, Carlos Monje, Egiluz (Yurrebaso, 64’), Luariz (Cortés, 89’), Sota y Garai.

Goles: 1-0. Primo (min 45). 1-1. Luariz (min 78).

Amonestaciones: dirigió el encuentro el colegiado Recio Moreno, asistido en las bandas por Gutiérrez Martino y Osta Lombrado, los tres del colegio navarro.

Estadio El Malecón. 2.700 espectadores.

“Entrenador nuevo, victoria segura”, así dice el refrán. No fue así en esta ocasión en el debut de Dani Mora al frente de la Gimnástica. Y eso que méritos hizo, porque alineó un once valiente y ofensivo que encontró el premio del gol al filo de la primera mitad. Primo fue el autor, confirmando así su gran estado de forma. Luariz igualó en la recta final en uno de los pocos errores de los blanquiazules, que continúan a 7 puntos de la salvación.

El técnico asturiano apostó por un sistema 1-4-4-2 con las novedades en el once de Fer –en el lateral derecho-, Alberto –en la derecha de la línea de cuatro centrocampistas- y Primo y Nacho en la dupla ofensiva. En el banquillo esperaron hombres como Camus, Vitienes o Víctor.

El camino lo había marcado Mori en la rueda de prensa de su presentación: “tenemos que colgar balones al área”. Y así fue. Jugador que llegaba a zona de ¾, oteaba el horizonte y acto seguido bombeaba el cuero hacia el área. Allí esperaba un buen número de atacantes blanquiazules en busca del gol.

Una primera parte con el Leioa como poseedor de la pelota pero con una Gimnástica dominadora de la situación. Y que avisaba en ataque. Nacho desató a la afición con un disparo forzado de la frontal que salió desviado por un defensor. Solo los reflejos y la velocidad del meta Iturrioz evitaron el tanto cuando el balón ya se colaba en su portería.

El Malecón se dio cuenta de que los suyos iban a por la victoria. Y no defraudó. El estadio torrelaveguense presentó una de las mejores entradas de la temporada y no solo eso, sino que también rugió como en las grandes citas aupando a los suyos.

Palazuelos advirtió de su poderosa llegada en segunda línea cabeceando un centro de Fer que finalmente se marchó desviado. Hizo lo propio Primo, en una acción a balón parado que acabó invalidando el juez de línea por fuera de juego.

Pese a que los visitantes movían la pelota con cierta comodidad, las ocasiones llevaban el color blanquiazul. Y además, bastante claras, como la que tuvo Nacho en el 33’ con un zapatazo de volea que cayó como una losa sobre el tejado de la red. Cantaba el gol El Malecón después del mal despeje de Iturrioz que cerca estuvo de aprovechar Nacho.

El único acercamiento del Leioa en el primer acto tuvo como protagonista a Fran Sota, que apuró línea de fondo y centró al corazón del área; allí no había nadie y la pelota se paseó por boca de gol.

Crecían los visitantes en su juego y en sensaciones, pero, justo al filo del descanso, golpeó la Gimnástica. Cusi cuelga hacia el área donde Nacho peina y Primo cuerpea con un defensor. Consigue zafarse del central y, prácticamente sin ángulo, supera a Iturrioz con un potente disparo a bocajarro. 1-0. Y descanso. “Sí se puede, sí se puede” cantaba la afición torrelaveguense.

Tras la reanudación la Gimnástica se aculó un tanto cerca de su portería. El cansancio hacía mella en un equipo que había maravillado a su afición en la primera mitad. Y el Leioa, a la desesperada, buscaría el empate desde bien pronto. Pero, sin embargo, las ocasiones de los visitantes no llegaron, más allá de un remate desviado a bote pronto de Sota. El propio Sota golpearía a manos de Álex Ruiz una falta cercana a la frontal; dos minutos después contestó Nacho con un remate que taponó la zaga rival.

Jon Ander Lambea introdujo a Yurrebaso y Juan Mena para buscar más profundidad en ataque, y eso incentivó a un equipo vizcaíno que se vino arriba. Aguiar se elevó en una acción de estrategia con poderío, pero su remate saldría fuera.

En el 78’, un error en la salida de balón de Cusi en su intento de despeje, propició la contra comandada por Sota. El más peligroso de los vascos se fue en velocidad, apuró línea de fondo y centró con mucho criterio entre Álex y la defensa. En el segundo palo remató en semi fallo Luariz, que, con mucha fortuna, consiguió superar a Álex Ruiz en un gol de ‘carambola’.

Ambos equipos quisieron buscar la victoria, aunque con más corazón que cabeza. Las únicas opciones de romper la igualada fueron para los locales, con un centro de Leandro que nadie alcanzó a rematar. Y con Salas, que entró en el 86’ para disponer de la más clara. Recibe al espacio, encara al último defensor, lo dribla y en su intento por seguir la jugada el contacto del defensa es suficiente para desequilibrarle y desbaratar su acción. Final. 1-1.

Empate insuficiente por los méritos mostrados para los de Dani Mori, que tendrán un nuevo duelo directo la próxima semana, el domingo ante el Gernika a las 17:00 horas.