Los blanquiazules anotaron cinco goles y dispusieron de varias ocasiones más para llevarse el partido.

Más no se puede hacer. Cinco goles y un sinfín de ocasiones para, al final, llevarse un único punto de la difícil visita a Merkatondoa. La Gimnástica se mostró netamente superior al Izarra en su propio feudo y mereció llevarse los tres puntos de tierras navarras.

Desde bien pronto avisó Leandro, anotando el primero de la tarde -que no subió al marcador-. Recibió de Fer en el interior del área y batió a Iricibar por bajo, decretando fuera de juego el juez de línea.

Encaraba Rozas al meta navarro cuando el colegiado señaló un agarrón de Vitienes al intentar ganar zona de remate. Con esas dos primeras acciones comenzó el enfado de los visitantes con el árbitro. Respondió el Izarra por medio de Laborda, pero su cabezazo no inquietó a Álex.

Y no perdonó Cristian, haciendo el 0-1 a la salida de un córner botado por Leandro. Se vino arriba el respetable desplazado desde Torrelavega. Más aún si cabe tras las ocasiones siguientes de Rozas, que desbarató en dos tiempos Iricibar, y, sobre todo, la de Palazuelos, errando un disparo claro desde el punto de penalti.

El que perdona lo paga. Centro lateral que Hinojosa coloca en la base del poste para poner el 1-1. Quizá el tempranero gol del empate inquietó a los torrelaveguenses, que pasaron por su peor momento del partido. Hasta el descanso. Antes de este, poco o nada ocurrió más que un disparo casi desde el suelo de Lucho que se marchó fuera.

Cisneros protagonizó la primera tras la reanudación, aunque su volea se fue desviada. La siguiente ocasión sería el segundo de la Gimnástica, anotado por el zaguero Albisu en propia meta al tratar de despejar un centro envenenado de Rozas. Poco duró la alegría en la parroquia torrelaveguense porque cuatro minutos después Casado igualaría el partido en un saque de esquina.

El orden y la disciplina táctica desaparecieron. Había que buscar la victoria. Y la Gimnástica no se desarmó y tuvo sus opciones para hacer el tercero. De hecho, lo hizo. Hasta en dos ocasiones. En ambas Primo se encontraba en supuesta posición anti reglamentaria y superó con calidad a Iricibar. Ambas decisiones no sentaron nada bien en el seno del conjunto cántabro, que protestó de forma airosa las decisiones del colegiado vasco.

Toni García fue el único que lo intentó para los suyos, pero su disparo en una falta lateral se fue por encima del larguero. Leandro, más activo en la segunda parte tirado a banda derecha, gozó de otras dos ocasiones. Primero se precipitó disparando con la zurda y, en la segunda, un defensa le privó del gol en la misma línea.

De nuevo Cristian hizo valer su superioridad física en otro saque de esquina, aunque esta vez sin éxito. Y Salas, que había entrado en el 85’, puso a prueba al meta local con un tiro raso cruzado. El Izarra dispuso de un par de acciones a balón parado en el descuento que fueron su único balance ofensivo en el segundo acto.

El conjunto torrelaveguense queda, tras 32 partidos, en la 18ª posición, a 3 puntos del puesto de promoción y a 5 de la salvación directa. El próximo partido de los cántabros será frente al líder, el Racing de Santander, el domingo a las 17:00 horas en El Malecón.